jueves, 3 de marzo de 2016

Entrenamiento de fuerza para GLÚTEO MAYOR

En la siguiente entrada vamos a hablar sobre el entrenamiento de la fuerza del músculo Glúteo Mayor. El glúteo mayor es un músculo que se encuentra en la parte posterior de la pelvis, de manera que tiene su origen en la superficie glútea del ilion, ligamento sacrotuberoso, fascia toraco-lumbar y sacro, y tiene su inserción en el tracto iliotibial. Es el más superficial de los tres glúteos por lo que es el más sencillo de palpar. Teniendo en cuenta la disposición de las fibras, el glúteo mayor realiza las acciones de extensión y rotación externa. Además, sus fibras superiores realizan abducción, y sus fibras inferiores realizan aducción. Por este motivo, en los ejercicios que presentamos a continuación vamos a realizar las dos posibilidades entre las que elegiremos dependiendo de la zona que queremos fortalecer.


A continuación vamos a presentar los tres ejercicios que hemos desarrollado para el entrenamiento de fuerza de este músculo. Como realizamos en la siguiente entrada, hemos planteado un ejercicio para aquellos pacientes que se encuentren entre un Balance Muscular de 1-2, otro ejercicio para un paciente que tenga un Balance Muscular de 3, y un tercer ejercicio para aquellos pacientes que presenten un Balance Muscular entre 4-5. 

Ejercicio 1: BM entre 1-2: aquellos pacientes que clasifiquemos en este nivel serán aquellos que notemos (al pedir la acción) a contracción del músculo pero no tengamos movimiento. Para estos casos y, desde nuestro punto de vista, es conveniente realizar ejercicio isométricos, de manera que el paciente vaya aumentando su fuerza para, posteriormente, realizar el movimiento completo. 


Para realizar este ejercicio vamos a colocar al paciente en decúbito prono, y el fisioterapeuta se sitúa contralateral a la pierna a trabajar (de esta manera se puede ejercer mejor la fuerza). En este ejercicio, la posición inicial y la final son las mismas ya que en un ejercicio isométrico no hay movimiento. Por lo tanto, el terapeuta va a colocar ambas manos en el tercio distal y posterior del fémur (un poco hacia la zona lateral), de manera que resista el movimiento de extensión y abducción de la pierna.  Con este ejercicio, el desarrollo de la fuerza iría más dirigido hacia las fibras superiores del glúteo mayor.


Por otro lado, si queremos fortalecer las fibras inferiores del glúteo mayor, la posición del paciente y del terapeuta será la misma. Lo único, que en este caso, el terapeuta colocará ambas manos en el tercio distal y posterior del fémur, por su parte interna (ligeramente). De esta manera, le resistimos los movimientos de extensión y aducción de cadera.

Ejercicio 2: BM de 3: los pacientes que nos vamos a encontrar en este punto serán aquellos que puedan realizar el movimiento completo en contra de la gravedad. Por lo tanto, el ejercicio que proponemos lo deberemos desarrollar hasta que el paciente comience a presentar fatiga, que será cuando paremos. 


Para llevar a cabo este ejercicio vamos a colocar al paciente en bipedestación y el terapeuta frente a él, colocará sus manos a la altura de la cadera de manera que se eviten las compensaciones que pueda realizar el paciente. Antes de comenzar el ejercicio, el paciente debe estar correctamente posicionado y le podemos haber enseñado el ejercicio para que tenga en la cabeza cómo se realiza.


Para realizar el ejercicio, también podemos colocar al paciente sujeto a la camilla, de manera que no se desequilibre y controle sus compensaciones (sólo en aquellos pacientes que presenten un alto conocimiento de su esquema corporal). Para llevar a cabo el ejercicio, el paciente debe realizar una extensión, rotación externa y abducción para trabajar las fibras superiores. El paciente realiza tantas repeticiones como pueda sin llegar a la fatiga. 


Como ya hemos comentado anteriormente, el glúteo mayor en función de las fibras realiza abducción o aducción. Por lo tanto, el ejercicio también lo podemos realizar con extensión, rotación externa y aducción de cadera, para trabajar analíticamente sobre las fibras inferiores del glúteo mayor. Siempre trabajamos antes de que el paciente presente fatiga. 

Ejercicio 3: BM entre 4-5:los paciente que nos vamos a encontrar en este grupo serán aquellos que puedan realizar el movimiento completo, en contra de la gravedad y con una resistencia ligera. Por lo tanto, para el desarrollo de este ejercicio vamos a usar un Theraband, que nos ayude a ofrecer la misma resistencia al paciente durante todo el recorrido sin entorpecerlo. 


La posición inicial que encontramos en este ejercicio consiste en colocar al paciente en bipedestación y el terapeuta frente a él, coloca el Theraband por la parte posterior del tercio distal del fémur. Sujeta los dos extremos del Theraband con ambas manos. Importante hacer consciente al paciente de las posibles compensaciones que pueda realizar para que el ejercicio se realice correctamente. 


Para trabajar las fibras superiores del glúteo mayor, vamos a pedir al paciente que venza la resistencia y realice una extensión, rotación externa y abducción de cadera. Importante controlar las compensaciones y que el terapeuta ajuste la resistencia ejercida al movimiento que estamos pidiendo al paciente. 


Para realizar el entrenamiento de fuerza sobre las fibras inferiores del glúteo mayor, pedimos al paciente que, venciendo la resistencia, realice una extensión, rotación externa y aducción de cadera. Importante que el movimiento sea realizado hasta el punto donde comienzan las compensaciones del paciente. El ejercicio lo vamos a realizar tantas veces como pueda el paciente sin llegar a la fatiga muscular. 

Como en los siguientes ejercicios indicaremos, es muy importante la constante comunicación con el paciente para que nos vaya indicando cuáles son sus sensaciones y percepciones para ver si estamos realizando o no correctamente los ejercicios; de manera que el entrenamiento vaya dirigido hacia la zona que queremos trabajar. 

Entrenamiento de fuerza para SARTORIO

En la siguiente entrada, vamos a realizar un entrenamiento de la fuerza para el músculo Sartorio. El Sartorio es un músculo de la cara anterior del muslo, que se origina en la Espina Ilíaca Antero-Superior y se inserta en la pata de ganso superficial, que llega a la tuberosidad de la tibia, por su parte más medial. De esta manera, este músculo cruza todo el muslo por su cara anterior, realizando las acciones de flexión, abducción y rotación externa de cadera; además de flexión y rotación interna de rodilla. Por lo tanto la acción de este músculo nos puede colocar en la posición "del sastre" o "de bailarina".


Después de realizar esta pequeña introducción sobre el músculo que vamos a trabajar, vamos a pasar a describir el entrenamiento de fuerza planteado para este músculo en concreto. En un primer lugar, vamos a plantear un ejercicio para un paciente que se encuentre en una Balance Muscular entre un 1-2, la segunda foto será para el paciente que se encuentre en un 3, y la tercera foto, para el paciente que se encuentre con un Balance Muscular de 4-5.

Ejercicio 1: BM entre 1-2: un paciente que se encuentre en esa situación querrá decir que vamos a notar contracción muscular, pero aún no tiene mucho movimiento. Por lo tanto, desde nuestro punto de vista hemos visto adecuado realizar un ejercicio isométrico del músculo a trabajar, para poder aumentar la fuerza y posteriormente realizar las movilizaciones.


Por lo tanto, para llevar a cabo el ejercicio, vamos a colocar al paciente en decúbito supino, pegado al borde de la camilla. El fisioterapeuta se coloca contralateral al lado a tratar, en bipedestación. Colocamos al paciente en la posición de sastre, pudiendo colocar la rodilla en ligera flexión y no en máxima (siempre dependiendo de nuestro paciente). El terapeuta va a colocar su mano craneal en el tercio distal del fémur, de manera que se le resista la flexión, la abducción y la rotación externa de cadera. Con la mano caudal se va a resistir la flexión de rodilla. De esta manera, vamos a pedir al paciente que realice una contracción y tendremos que adaptar nuestra fuerza para conseguir que no haya movimiento ninguno, sólo buscamos un ejercicio isométrico. El tiempo de contracción será hasta que el paciente empiece a presentar fatiga.

Ejercicio 2: BM de 3: el paciente con el que nos vamos a encontrar para realizar este ejercicio, va a ser un paciente que pueda realizar el movimiento activando el músculo sartorio en todas sus acciones, en contra de la gravedad. Por lo tanto, el ejercicio va a consistir en realizar el movimiento hasta la posición del sastre en contra de la gravedad, hasta que el paciente presente fatiga. 


Para realizar el ejercicio vamos a partir desde una posición inicial, que es la que se muestra en la imagen superior. El paciente se coloca en decúbito lateral, con la pierna a trabajar arriba, y la pierna inferior flexionada (a la altura de la cadera y la rodilla) para conseguir estabilizarse. Por otro lado, el fisioterapeuta se coloca a la espalda del paciente (de manera que no entorpezca el movimiento de éste) y coloca ambas manos en la pelvis del paciente para evitar las compensaciones y desequilibrios. 


Tras haber colocado al paciente en la correcta posición inicial, pasamos a indicarle el movimiento que debe realizar. Debe conseguir tocar con la planta del pie de la pierna superior, la parte interna de la rodilla inferior. De esta manera se consigue la posición de sastre y de bailarina. Conforme el paciente vaya realizando repeticiones, puede ir apareciendo la fatiga por lo que puede realizar compensaciones que debemos frenar. El papel del fisioterapeuta es muy importante para que el paciente no presente dolores.

Ejercicio 3: BM entre 4-5: ahora, el paciente que nos vamos a encontrar en esta situación, es capaz de realizar el movimiento completo activando el músculo, en contra de la gravedad y con cierta resistencia. Por lo tanto, para la realización de este ejercicio vamos a contar con la ayuda del Theraband, para ofrecer resistencia al movimiento del paciente. 


Como en el ejercicio anterior, primero debemos colocar al paciente en una posición correcta inicial para luego comenzar a realizar el ejercicio. En un primer momento debemos colocar el Theraband de manera que se resista todo el movimiento, con las diferentes acciones del músculo Sartorio. Por lo tanto, colocamos el Theraband alrededor de la rodilla del paciente y el fisioterapeuta sujeta con sus manos ambos extremos. El paciente debe colocarse en bipedestación y, si no presenta buen equilibrio, cerca de la camilla, una mesa, etc. donde pueda sujetarse para continuar con el ejercicio. 

Cuando hayamos colocado al paciente en la posición correcta y él este sujeto para que no tenga miedo a realizar el ejercicio, lo realizaremos. Pedimos al paciente que lleve la planta del pie de la pierna a trabajar, al contacto con la parte interna de la rodilla de la otra pierna. De esta manera llevamos al paciente hasta la posición de sastre o de bailarina, realizándolo en contra de la gravedad y con la resistencia que se le está ofreciendo. Es muy importante que el Theraband esté bien colocado, para que podamos resistir el movimiento desde el inicio hasta el final. 

Para llevar a cabo el entrenamiento de la fuerza es muy importante que, como fisioterapeutas, tengamos en cuenta las sensaciones y percepciones del paciente, de manera que no sobrepasemos el límite pudiendo provocar alguna lesión.

martes, 23 de febrero de 2016

Nuevas Tecnologías en Fisioterapia

A lo largo de esta entrada, vamos a realizar una reflexión sobre el papel de las Nuevas Tecnologías en relación con el mundo de la Fisioterapia. 

En los últimos años hemos comprobado el gran desarrollo que han tenido las Nuevas Tecnologías y, como futuros profesionales, debemos adaptarnos a este desarrollo y adecuar nuestro trabajo a estos avances. Por otro lado, desde mi opinión, estos avances que se están produciendo pueden ayudarnos a desarrollar un trabajo mucho más cercano a nuestros pacientes. Dentro de las herramientas que podemos utilizar para nuestro trabajo, van desde el correo electrónico o dispositivos como Whatsapp, hasta nuevas máquinas que se vayan desarrollando con los años.

Por ejemplo: si estamos trabajando en una clínica y recomendamos una serie de ejercicios de estiramientos para nuestro paciente que acude a la consulta con una gran hipertonía de la musculatura de la cadena posterior; podemos ofrecerle nuestro correo electrónico para que nos haga llegar vídeos o fotos con dudas que pueda tener en casa a la hora de llevarlos a cabo. De esta manera podremos asegurarnos que el paciente no realiza compensaciones, realiza los ejercicios correctamente, en los ángulos indicados, etc. Por lo tanto, vamos a poder tener un contacto más cercano con nuestros pacientes, y que no se resuma a una sesión de 45 minutos una vez cada semana. 

Otra posibilidad sería, por ejemplo, realizar vídeos en los que salgamos nosotros, de manera que realicemos los ejercicios que recomendamos al paciente y así tenga un modelo que lo puede seguir en casa para saber cómo se realizan los ejercicios correctamente. Se ha demostrado muchas veces, que de la manera que mejor aprendemos es mediante la imitación y ejercicios en espejo.

Como ya comentamos antes se están desarrollando una serie de máquinas que también pueden ayudarnos a completar nuestro tratamiento, con el que pueda realizar estos pacientes desde su hogar. Por ejemplo, se han desarrollado en los últimos años, máquinas que ayudan a los pacientes que no tiene capacidad de toser por diferentes patologías, a realizar esta acción que le ayudan a sacar las secreciones que tengan en los pulmones. De esta manera, cuando realicemos nosotros con estos pacientes las técnicas para favorecer la salida de estas secreciones, ellos pueden seguir expulsándolas en sus hogares.

En resumen, desde mi punto de vista, creo que las Nuevas Tecnologías pueden ayudarnos en el desarrollo de nuestro trabajo, incluso facilitándolo bastante. Además, por suerte, tenemos una profesión que no lo va a poder realizar el paciente sólo en casa todo el tratamiento; podrá realizar sólo una parte del tratamiento, pero siempre van a necesitar un profesional que les realice la mayor parte del tratamiento. 

Técnica de TINI para Trapecio Superior

En esta entrada, vamos a realizar la técnica de TINI para el trapecio superior. La técnica es la misma que la realizada para los escalenos pero en otro músculo diferente. 

El trapecio es un músculo de la parte posterior del tronco. Es un músculo grande que se origina en la línea nucal superior, apófisis mastoides y apófisis espinosas de C1-D12. La inserción de este músculo se sitúa en el acromion, tercio lateral de la clavícula y espina de la escápula. El trapecio es un músculo que realiza extensión, rotación contralateral e inclinación homolateral del raquis; además de elevación del muñón del hombro, aducción de la escápula y descenso de la escápula. 

La técnica se realizará sobre el trapecio superior. El mecanismo de la técnica será el siguiente:


1) Palpación de las fibras del músculo en busca de una banda tensa, y el punto gatillo. 
2) Presionamos el punto que encontramos para saber si el paciente tiene un dolor entre 7-8 en una escala sobre 10. Buscamos la liberación posicional para que el dolor disminuya.
3) Mantenemos esa posición durante 20-30 segundos.
4) Llevamos al paciente hasta la posición de estiramiento, y pedimos al paciente una contracción de 6 segundos. 
5) Después de la contracción isométrica, el paciente (a través de una contracción de antagonistas) llega a la siguiente barrera muscular. 
6) Volvemos a la posición inicial y realizamos un estiramiento de la piel, en la zona donde estaba el punto gatillo durante 20-30 segundos. 

7) Por último, debemos reevaluar si ha desaparecido el dolor del punto gatillo.

A continuación en el vídeo vamos a observar la realización de la técnica TINI para trapecio superior.


Técnica de TINI para Escalenos

A lo largo de esta entrada vamos a realizar la técnica de TINI, como tratamiento de un punto gatillo del músculo escaleno.

Los escalenos son unos músculos que se encuentran en la zona antero-lateral de la columna cervical. Tenemos un escaleno anterior que se origina en las apófisis transversas de C3-C6 hasta la primera costilla. El escaleno medio que se origina en las apófisis transversas de C2-C7 hasta la primera costilla. Y el escaleno posterior se origina de C4-C6 hasta la segunda costilla. Debemos tener cuidado porque entre estos músculos pasa el paquete vásculo-nervioso braquial, por lo que podemos encontrar mucha patología relacionada con la tensión de estos músculos.


La técnica de TINI, consta de una serie de pasos que son los siguientes:
1) Palpación de las fibras del músculo en busca de una banda tensa, y el punto gatillo. 
2) Presionamos el punto que encontramos para saber si el paciente tiene un dolor entre 7-8 en una escala sobre 10. Buscamos la liberación posicional para que el dolor disminuya.
3) Mantenemos esa posición durante 20-30 segundos.
4) Llevamos al paciente hasta la posición de estiramiento, y pedimos al paciente una contracción de 6 segundos. 
5) Después de la contracción isométrica, el paciente (a través de una contracción de antagonistas) llega a la siguiente barrera muscular. 
6) Volvemos a la posición inicial y realizamos un estiramiento de la piel, en la zona donde estaba el punto gatillo durante 20-30 segundos. 
7) Por último, debemos reevaluar si ha desaparecido el dolor del punto gatillo.

En el siguiente vídeo, podemos comprobar cómo se realiza la técnica. 



¿Qué es un punto gatillo?

En esta entrada, vamos a hablar sobre lo que es un punto gatillo y las técnicas que tenemos para llegar a tratarlos. Profundizaremos más en la técnica de TINI, que puede ser la más completa de todas. 

Como punto gatillo entendemos que es una zona hiperirritable en un músculo esquelético asociado a un nódulo palpable, hipersensible, localizado en una banda tensa. La zona en la cual se encuentra el punto gatillo es una zona dolorosa a la compresión y puede dar lugar a un dolor referido característico de cada músculo. También podemos encontrar hipersensibilidad a la presión referida, disfunción motora y fenómenos autonómicos. Por lo tanto, la sintomatología que podemos encontrar en relación al punto gatillo es:

- Nódulo palpable hipersensible (forma de grano de arroz, dentro de una banda tensa). 
- Zona dolorosa a la compresión.
- Dolor referido en zonas determinadas dependiendo de cada músculo.
- Debilidad muscular.
- Fenómenos vegetativos. 

Los puntos gatillo no son contracturas, pero sí que lo podemos encontrar dentro de una contractura. Es un hipertono de las sarcómeras, es decir, las sarcómeras están contraídas pero sin que haya llegado un potencial de acción. Cuando hablamos de dolor referido, nos referimos a toda aquella sensación como quemazón, pesadez, hormigueo, etc. que se produce cuando exploramos un punto gatillo. No es lo mismo el dolor referido que el dolor irradiado, ya que el irradiado sigue el camino de los nervios. 

Dentro de los punto gatillo, podemos encontrar dos tipos diferentes: puntos gatillo activos  (a la compresión producimos espasmo local, aumento del dolor en el punto, hipersensibilidad en la zona de dolor referido y fenómenos vegetativos) y puntos gatillo latentes (no presentan dolor espontáneo, duele a la presión, y la amplitud del movimiento está limitada). 

La etiología que pueden desencadenar los puntos son: el estrés muscular, microtraumatismos de repetición, traumatismos agudos, enfriamientos bruscos generales o regionales, agotamiento o fatiga, patologías degenerativas vertebrales, radioculopatías, inflamaciones articulares, inmovilizaciones parciales, deficiencias nutritivas, alteraciones hormonales, patologías viscerales, trastornos emocionales, malos hábitos posturales, etc. 

¿Qué queremos conseguir con el tratamiento de los punto gatillo?: lo primero queremos inactivar el punto, elongar el músculo y aliviar el dolor que presenta el paciente. Tenemos varias técnicas para abordar esta patología:

- Compresión isquémica: debemos palpar la banda tensa, encontrar el punto gatillo y ejercer una presión donde el dolor debe estar entre un 7-8/10. En ese punto mantenemos la presión hasta que disminuya por lo menos a un dolor de 2-3/10. Evaluamos siempre antes y después de realizar la técnica. 

- Liberación posicional: realizamos una compresión de 7-8/10, sin disminuirla, realizamos una movilización pasiva hasta que encontramos en un punto en el que el dolor disminuye. Normalmente, la movilización suele ser hacia el acortamiento muscular. Mantenemos esa posición durante 90 segundos y volvemos lentamente a la posición neutra. Reevaluamos el punto. 

- Técnica Inhibitoria Neuromuscular Integrada (TINI): para realizar esta técnica debemos encontrar la banda tensa y el punto gatillo. Realizamos la presión para comprobar que presenta un dolor entre 7-8/10 de dolor. Después realizamos la liberación posicional y mantenemos durante 20-30 segundos. A continuación llevamos al paciente hasta la posición de estiramiento del músculo, le pedimos una contracción isométrica del músculo durante 6 segundos, esperamos 2 segundos de silencio neurológico y después el paciente debe llegar a la siguiente barrera por acción de los antagonistas. Volvemos despacio a la posición inicial y realizamos un estiramiento de la piel sobre la zona donde estaba el punto gatillo, durante 20-30 segundos. Por último, reevaluamos para ver si ha desaparecido el dolor.


Después de este resumen sobre los puntos gatillos, vamos a pasar a realizar el tratamiento de dos músculos con la técnica TINI, en las siguientes entradas.

Un saludo!